Estoy leyendo un libro que me regaló mi maestro Amado Barrera, Jornadas Regiomontanas de Gerardo de León. Un paseo por el legado de don Manuel L Barragán y el entorno que le tocó vivir.

«Los hombres de carácter son infinitamente más raros que los de talento».

«El talento es una cualidad; el carácter una virtud».

«En el período de 1867 a 1890 va a iniciarse la industrialización de Monterrey «.

«Quien escribe estas líneas se ganaba unos centavos llevando el nixtamal de doña Panchita Villarreal a un molino más allá de la Alameda».

No hay duda que don Manuel es uno de los forjadores del carácter del norestense, y la época que le tocó vivir fue una de grandes cambios y mejores logros.

Don Manuel vivió en una casa en la Alameda, en la entrada tenía un jazmín, al salir por la mañana cortaba una flor del jazmín para ponérsela en la solapa del traje.